Un lunes dijo basta y se nos fue. No se murió, porque para él eso era imposible y para nosotros, también es así, porque Eduardo sigue entre nosotros.
Siempre decía que le gustaba vivir y lo demostraba.
La vida le parecía corta, por eso se la gastó toda y no dejó ni un poquito así.
Se fue como le gustaba, sin nada, y como nada se fué, no de nosotros, sinó de los que utilizaron sus días.
Eduardo fué, es y será siempre; pero otros, para ser, le hicieron saber que hay que aprender a no ser y ayer quisieron convencernos que aprendió. Para nosotros fué, es y seguira siendo.
Jamás le puso llave a la puerta; su casa y su amistad siempre estaban abiertas, aun cuando no estaba, y permanecerán abiertas aún cuando no lo dejen estar.
2 comentarios:
Un amigo, se fue. Debido a que estoy concurriendo muy poco a la universidad no me enteré a tiempo para estar junto a Eduardo y junto a sus amigos. Recién ayer me dieron la noticia las chicas del Área de Comunicación Institucional(mis ex alumnas de comunicación). Aunque no se haya ido, porque cuando se es, jamás se dejar de ser, igual lo voy a extrañar en todos y en cada uno de los pasillos y sectores de la Universidad. Mis condolencias a la familia. Con afecto. Eduardo Quintana (el "teacher de inglés", como él me conocía)
Gracias Profe!
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