La movida estudiantil, que se generó en la Universidad Católica de Santa Fe, en resguardo de las posibilidades del alumnado local para poder continuar con sus estudios, puestos en peligro debido a un desprejuiciado, insensible y desmedido aumento en los valores de las cuotas mensuales, derivó en una sucesión de denuncias contra la conducción de esa casa de estudios y el Directorio del misma.
Esas denuncias, que tenían por finalidad poner en conocimiento a la comunidad de la UCSF y a la sociedad toda, mostraban los vergonzosos y deleznables aumentos de los ingresos mensuales de cada miembro de la conducción de la universidad católica, los que contrastan y denigran enormemente los sueldos del personal docente y no docente, poniendo en verdadero peligro el sostenimiento de esa fuente de trabajo, que no recibe subsidios y que se mantiene, únicamente, con la cuota mensual del estudiantado.
Desde APUC, de manera reiterada y tal como lo expresamos en este medio, hemos alertado acerca de las consecuencias que ese grosero aumento en los ingresos de la conducción podrían ocasionar al sostenimiento de nuestra fuente laboral; pero esas alertas han caído en saco roto, tildadas de mentirosas y consideradas como denuncias destinadas a desestabilizar a una conducción ejemplar y austera.
Pero algunos medios, aquellos no presionados por la quita de pauta publicitarias, han tomado en sus manos el tema y lo han traído a la luz, poniendo las cartas sobre la mesa y mostrando esta verdad revelada.